Uno de los problemas estéticos más comunes en el rostro de cualquier persona es la aparición de bolsas en los ojos. Debido a su presencia, una persona puede aparentar tener mayor edad u ofrecer un aspecto cansado y estropeado. En este post pretendemos ofrecerte las claves para conocer las causas y los tratamientos a seguir para evitar la aparición de ojeras o bolsas en los ojos.
Para poder mejorar cualquier problema ya sea estético o de salud, es muy importante atender a las causas que provocan dicha complicación. En el caso de las ojeras el problema fundamental es la mala circulación y la retención de líquidos que se originan debido a unos malos hábitos, creando así esas antiestéticas bolsas prominentes en la parte inferior de los ojos. Aquí os damos algunas de las causas que provocan esa retención de líquidos en los ojos y los tratamientos para poder difuminar las bolsas y/o ojeras que se originan:
1. Falta de descanso
La alteración del sueño es uno de los factores más destacados a la hora de retener líquidos en esa zona. Es recomendable descansar y dormir un mínimo de 8 horas para estar activo y lucir un aspecto radiante. Para paliar esto, puedes colocar dos bolsas de infusión de manzanilla templadas en cada uno de nuestros ojos, deshinchando así la zona para notar una mirada más descansada y aliviada. El té rojo y el pepino también tienen propiedades calmantes que aportan frescor extra a tus ojos.
2. Factores hereditarios
Los genes también influyen en este problema de estética. Si nuestro caso es genético debemos procurarnos alimentarnos como es debido. Consume principalmente fruta, verduras y hortalizas ya que ayudarán a mejorar la circulación y a rejuvenecer tu rostro notablemente.
3. Falta de hidratación
Es fundamental hidratarte alrededor de los ojos ya que en esa zona la piel es muy fina y puede resentirse con facilidad. Con el uso de cremas específicas para hidratar esa zona descubrirás resultados muy pronto. Es importante también el consumo de agua para poder depurar y mantener hidratado el organismo.
4. Malos hábitos: consumo de alcohol y tabaco.
El consumo de tabaco y alcohol son nocivos para la salud y para nuestra piel. Son responsables también de la retención de líquidos y por lo tanto de la aparición de bolsas en los ojos.